Dentro de la gestión de almacenes y centros logísticos, existen dos operaciones esenciales para el buen funcionamiento y cumplimiento de los pedidos: el picking y el packing. Se trata de la recolección y el empaque de los productos seleccionados por los clientes, cada uno de los cuales se ve afectado por las prácticas instaladas en la organización del almacén.
La preparación de los pedidos genera impacto en los costos operativos. No obstante, cuando se encuentra bien gestionado, añade valor a la cadena de suministro y mejora la experiencia del cliente. De modo que estas dos operaciones resultan importantes para ganar la eficiencia y flexibilidad que contente a los clientes y reduzca errores de selección significativos.
El picking se refiere a la recogida de pedidos dentro del depósito. Cubre la fase inicial de la recolección y empaque:
El packing se refiere al embalaje y procesamiento de productos para su envío. Esto puede incluir varios pasos, pero en la mayoría de los casos, el packing comprende:
¿Cómo es la preparación del pedido?
Para ejecutar un proceso estándar de recolección y empaque, los pasos básicos para una tienda online, minorista u operador logístico consisten en:
A primera vista, el picking parece un trabajo sencillo. Sin embargo, la tarea requiere de planificación previa y estrategias adecuadas según el tamaño del almacén, el sistema de almacenamiento y la gestión de stock. La mejor estrategia de picking dependerá de los productos, el volumen de ventas y la cantidad de espacio disponible. La mayoría de los almacenes elige entre estos 4 métodos:
Por otro lado, el packing se presenta en distintos niveles:
En la organización de un almacén, los sistemas de picking y packing requieren de mucha atención y mejoras constantes en las prácticas para optimizar el proceso completo. Aunque hemos definido cada etapa de manera independiente, ambas juegan una partida consecutiva para entregar los pedidos en tiempo y forma, lo cual se transforma en un factor esencial cuando se trata de estar al día frente a la competencia. Reunimos algunos consejos para optimizar la paquetería:
Planificar las rutas de recolección. Es importante tener en cuenta el recorrido que mejor se adapte a la infraestructura y distribución del almacén, el tipo de productos y el volumen, los desplazamientos para la recolección y las normas de seguridad.
Verificar los pedidos. El tamaño de la empresa definirá un método de picking adecuado. Esta etapa consume mano de obra y, a menudo, la selección puede arrojar errores en la consolidación. Es esencial verificar los artículos antes de empacar. Para ello son útiles los códigos SKU.
Favorecer la eficiencia con un programa de gestión. Un almacén rinde mejor con un sistema de gestión que beneficie el flujo de trabajo, el control de stock y la automatización en algunos sectores, más aún cuando la empresa crece en volumen de pedidos y las tareas se complican.
En suma, cada negocio implementará su propio método de picking, según sus estrategias de almacenamiento e infraestructura. Solicita asesoramiento en Eternity. Contamos con expertos que sabrán sacar el mayor provecho de tu logística de almacenes y distribución y mejorar las rutas de recolección.