Aunque el mundo ha sido capaz de reaccionar frente al efecto dominó de la crisis logística de los dos últimos años, muchas pymes intentan volver a las ganancias anteriores al coronavirus y ponen el interés en estrategias para vender, sobre todo en temporadas comerciales como las fiestas de fin de año. Estas fechas son un impulso fuerte para reactivar la economía, a través del consumo interno y la reducción de inventarios.
Dentro de estos esfuerzos, el Buen Fin se repite desde 2011 para fomentar el mercado mexicano, en las semanas previas a Navidad. Esta nueva edición con descuentos en comercios y tiendas online será del 18 al 21 de noviembre de 2022. Por consiguiente, los freight forwarders o agentes de carga deben tomar algunas medidas en esta temporada de mayor demanda de mercado para ayudar a sus clientes. Veamos cómo prepararse para esta época y planificar el servicio de almacenaje y distribución.
En primer lugar, debemos mencionar que la logística internacional ha comenzado a superar la crisis de los contenedores vacíos y la congestión de los puertos que habían reclamado toda la atención de los productores y las cadenas de suministro en la temporada anterior. El COVID-19 impactó de lleno en la logística internacional y los problemas del transporte marítimo exacerbaron la crisis económica.
Para CEPAL, el alcance de los efectos económicos de la pandemia llega a más del 90% de los países del mundo, cuyas “cadenas globales de valor fueron el principal canal de transmisión de los efectos del COVID-19 al comercio mundial”. En particular, las caídas del tráfico de contenedores afectan la confiabilidad y continuidad de los servicios marítimos y las operaciones de comercio internacional. A esto también se suma el aumento de las cargas abandonadas en destino frente a la inestabilidad de los mercados y su consecuente costo de almacenamiento que impacta en las navieras.
Las mayores flotas marítimas están operadas por países europeos y asiáticos. El mismo boletín de CEPAL indica que América Latina y el Caribe se caracterizan por una industria marítima “mayoritariamente privada, con flotas pequeñas, cobertura geográfica de distancias no muy largas y de especialización diversa”. Por eso, la falta de contenedores en China y las acciones de ajuste comercial de las navieras han afectado tanto a América Latina y México. Según CEPAL, ese ajuste empresarial incluyó reconfiguración de rutas, cambios de reservas y reorientación de las estrategias para disminuir los efectos de la congestión de los puertos.
Aunque la industria marítima comenzó a movilizarse un poco más, la logística internacional enfrenta nuevos desafíos en 2022 a partir del conflicto Rusia-Ucrania y la inflación mundial. Entre tantos efectos, las consecuencias económicas se trasladan a las cadenas de abastecimiento y provocan falta de materias primas, insumos y recursos.
Dentro de este contexto, las navieras comenzaron a reorganizar los calendarios con vistas a las fiestas de fin de año que aumentan la demanda en todo el mundo. La Navidad es un evento comercial igual de importante que el Black Friday y el Buen Fin.
En el porcentaje de ventas del Buen Fin, se destacan la indumentaria, los artículos electrónicos, los electrodomésticos y el calzado. La edición de 2021 presentó una leve mejora comparada con 2020, lo que hace pensar que 2022 superará los pronósticos, dados los avances de vacunación masiva y el mayor flujo económico.
Sin embargo, el panorama que apuesta por despertar el consumo mexicano no queda ajeno a los retos de la logística internacional, con los fantasmas de la congestión pandémica que se conservan en algunos destinos, los conflictos bélicos y la inflación mundial que azota a muchos países.
Factores para considerar en la temporada alta
En suma, las fiestas de fin de año comprenden la temporada con alta demanda de productos. Nuestra plataforma ELIS permite la planificación anual y en temporada alta, ya que integra gráficas para una mejor toma de decisiones en tu negocio.