En el entramado global que sostiene las cadenas de suministro, una tarea compleja es la gestión de costos que aseguren la disponibilidad de productos en los mercados y contribuyan a la eficiencia y competitividad. Sin embargo, ciertos factores pueden desestabilizar las operaciones y aumentar los costos logísticos de forma impredecible, más aún cuando la logística internacional está sujeta a numerosos desafíos que afectan el flujo de los bienes. Para las empresas es esencial implementar estrategias logísticas para controlar de manera efectiva estos costos en tiempos inciertos y mantener su competitividad.
En el contexto mundial, los últimos eventos nos recuerdan la dependencia de la logística, cuya interrupción marca diferentes efectos en las cadenas de suministro. Así, el conflicto en la ruta del Mar Rojo, el bloqueo del Canal de Suez o la crisis hídrica en el Canal de Panamá son algunos ejemplos destacados que afectaron de algún modo las operaciones logísticas y aumentaron las tarifas de los transportes con consecuencias económicas a nivel global.
Cuando se buscan respuestas para controlar los costos logísticos, es necesario considerar diferentes factores en un entorno de desafíos e incertidumbre globales para alcanzar metas sustentable en el negocio. A la valoración de los riesgos logísticos, se suma la capacidad de respuesta ante la eventualidad y la resiliencia de la cadena de suministro.
Entre los principales riesgos que afectan los costos logísticos se encuentran:
Los costos logísticos varían según el producto, con un enfoque particular en los gastos asociados a inventarios y requisitos de manejo, transporte y almacenamiento. En la mayoría de los casos, el transporte representa más del 50% de estos costos. En los envíos internacionales, se suman costos de descarga, distribución y transporte interno.
Es decir, en cuanto a relevancia, el transporte es uno de los componentes más significativos en los costos logísticos internacionales. La variación dependerá del tipo de transporte utilizado, la distancia, la urgencia del envío y la naturaleza de la carga, así como de las tarifas acordadas con los transportistas.
Un elemento que atraviesa la incertidumbre logística es el combustible, uno de los componentes más críticos en la evaluación estratégica. Cualquier cambio abrupto en su precio puede tener un efecto inmediato en el costo total de las operaciones, dado que las empresas de transporte deben ajustar las tarifas para mantener su propia rentabilidad. Así, los precios volátiles del combustible están influenciados por diversos factores como las tensiones geopolíticas, la oferta y demanda global de petróleo, las políticas energéticas y las situaciones de emergencia.
Para negociar tarifas más favorables, las empresas pueden:
Cuando se analizan los factores que influyen en la sostenibilidad de las operaciones, los costos logísticos se encuentran en el top de la planificación empresarial. En este sentido, la incertidumbre en la logística global suma una lista de preocupaciones, tales como las condiciones de financiamiento más restrictivas, los márgenes operativos reducidos y los riesgos que son difíciles de predecir. La planificación, el monitoreo y la evaluación constante de estos costos son prácticas imprescindibles para proteger la rentabilidad de los negocios.
La importancia de gestionar estos costos logísticos radica en que las empresas preparadas tienen mayor capacidad para adaptarse a los cambios, cuidar la sostenibilidad de las operaciones y proteger su margen de ganancia en tiempos inciertos. Algunas herramientas y estrategias logísticas para optimizar costos en tiempos de crisis:
Si bien la logística internacional se ve desafiada por las condiciones fluctuantes y tensiones geopolíticas, una gestión estratégica puede hacer la diferencia para enfrentar estos retos globales. Desde Eternity apuntamos a la planificación proactiva y tecnológica para sostener la competitividad y garantizar el crecimiento a largo plazo.