U
na ruta de distribución logística resuelve la conexión desde el punto de producción hasta el mercado o los clientes. En esta etapa, hay variedad de medios de transporte de mercancías con posibles paradas en depósitos, almacenes o terminales para un cambio modal hasta llegar a su destino final. La planificación de la ruta de transporte incide en la experiencia del cliente. Por eso es tan importante analizar cómo hacer un plan de ruta de transporte y conocer cuáles son los factores que repercuten en las decisiones logísticas.
La ruta de transporte condiciona los recursos, los tiempos, los costos aledaños, la experiencia del cliente y la cadena de suministro de productos. Para elegir la mejor alternativa según el medio de transporte y el tipo de mercancía es necesario hacer una evaluación de rutas de transporte que servirá luego para establecer la propia red logística a modo de consolidar una mejor prestación del servicio.
La capacidad necesaria de los vehículos debe responder al sistema de redes y entregas. De modo que esta selección de rutas de transporte, tipo de vehículos y nodos intermedios deben estar contemplados en los costos de distribución y coordinados para trasladar la mercancía de la forma más eficiente. En general, el ritmo de producción y los costos van a justificar un diseño de rutas específico. ¿Cuáles son los beneficios?
En toda buena logística se reducen los plazos de entrega y costos de combustible al crear rutas de reparto óptimas, ajustadas a los factores que influyen en el traslado de mercancía.
Los costos inciden en las políticas de la empresa y los contratiempos operativos generan dificultades si no se planifican las rutas de distribución. Los vehículos están asociados con los gastos operativos y de mantenimiento propios y, por otro lado, el personal de conducción, seguros e impacto ambiental. La planificación adecuada optimiza los recursos que se utilizan.
El diseño de una ruta de transporte cumple con aspectos que velan por la distribución logística y mejoran el rendimiento de las compañías. Contar con un plan de rutas reduce costos de producción de los bienes de consumo y resuelve todo tipo de situaciones con mayor rapidez.
Una ruta de transporte eficiente es clave para responder a los clientes eficazmente. Las soluciones digitales y la comunicación son fundamentales para acercar al comprador con sus productos en viaje, como lo hace Elis, la plataforma de gestión de carga de Eternity. Se puede hacer un seguimiento en tiempo real, ver la localización en los mapas y contar con información oportuna.
Según la mercancía que pueda viajar en un vehículo, la ruta logística suele ajustarse a la capacidad de ese medio de transporte y los intervalos de envío que se gestionen entre las empresas intermediarias. Los servicios logísticos de carga se planifican de acuerdo con diferentes factores:
En particular, para los medios de transporte terrestre, es recomendable hacer un estudio de los tipos de carreteras y sus características, la densidad del tráfico, los nodos de producción y actividades logísticas, las condiciones del asfalto y el diseño de rutas de reparto.
En esta planificación de rutas hay que conocer al detalle las características de los vehículos que integran la red de distribución de mercancías. Las empresas deben tener un inventario de todos los recursos y la disponibilidad de unidades.
La mercancía en viaje debe ir acompañada de la documentación necesaria y, por otro lado, en la ruta de transporte pueden existir condiciones especiales que requieren de permisos para acceder a puertos o aeropuertos o para manipular la carga y descarga.
Este factor se relaciona con la capacidad del vehículo. Por ejemplo, un transporte marítimo tiene capacidad para grandes volúmenes, pero no resulta tan rápido. Por eso, el ajuste de los tiempos y los plazos de entrega tratan de satisfacer al mayor número de clientes y no solo a uno en particular.
Es un elemento que determina en gran medida cuál será la mejor ruta de transporte y el tipo de vehículo. Por ejemplo, los productos perecederos o los materiales sanitarios encuentran ventajas en el transporte aéreo. Las mercancías que necesitan recorrer largas distancias en tiempos más o menos acordes pueden viajar en ferrocarril. Es esencial conocer el tipo de mercancía para planificar la ruta de distribución logística.
En cuanto a medios de transporte, la decisión tiene en cuenta elementos como el volumen o peso, la cobertura global, la rapidez y confiabilidad, la eficiencia en largas rutas terrestres, el embalaje y los costos finales.
El transporte marítimo es conveniente cuando se habla de mercancía a granel o de gran volumen para trasladar entre continentes. El transporte aéreo resuelve cargas pequeñas y reposición de inventario con celeridad. El transporte ferroviario es el medio más eficiente para llevar muchos contenedores completos a destino. El transporte por carretera es ideal para repartos programados dentro de la ciudad o combinando ciudades de varios estados. En general, la mercancía que viaja largas distancias en barco o ferrocarril luego cumple una última etapa en camión.
La posibilidad de alcanzar destinos al otro lado del mundo es un servicio que crece y potencia las rutas de transporte marítimo en México. En Eternity creamos estrategias a la medida de cada cliente y conocemos la mejor ruta de transporte para tu carga marítima o terrestre.